Los que me conocen saben que no me alegro o disgusto por el color de la medalla. Podría ser el triple de feliz con una medalla de bronce en 1500ml colgada en mi cuello, que con una de Oro en el 5000ml. Mi felicidad y satisfacción en un Campeonato depende de lo rendido en cuanto a las expectativas previas y a los entrenamientos.
No me importa irme a casa con una medalla de plata colgada, porque me sabe a Oro. Hace 3 semanas no iba a estar luchando en este Campeonato... Y miradme... Plata en los 5000ml... Luchando en todo momento por el Oro, creyendo en mis posibilidades plenamente, y luchando hasta el último metro a pesar de la falta de entrenamiento, que se notó bastante a falta de 4 vueltas, y ya no os cuento en la última... He sufrido, y mucho. A falta de 2 vueltas esperaba el ataque de Tania en cualquier momento. Llegó a falta de 300m sin poder responder a ello ni siquiera un instante. Mi mente decía: "No te rindas", mi corazón me decía: "Deséalo con fuerza y vencerás", pero mis piernas eran las que mandaban en ese momento, diciéndome: "Tienes lo que me has entrenado", y tanto... Me creía a falta de 200m que ni llegaba, o que lo hacía andando... Pero llegué a meta. En ese momento ni estaba triste por la derrota, ni feliz por llegar, siendo Subcampeona de España. No sentía nada... Sólamente una voz que me decía: "Lo has sufrido y lo has luchado, confórmate pues ni siquiera pensabas estar aquí". Así fue y así es, estoy conforme y feliz. Mi más sincera enhorabuena a Tania Carretero, me alegro de que vuelva a estar en la cima, y mis más sinceros ánimos a Esther Navarrete que aún lo podía haber hecho mejor si no llega a tener los problemillas que tiene.
Realmente me alegro de haber venido a disputar mi español, gracias a eso pude recargar fuerzas. El Campeonato me ha hecho ver cosas que he de cambiar, otras que no, y me ha dado la oportunidad de rodearme de todos vosotros, llenándome con palabras de optimismo. Me ha hecho feliz volver a ver a compañeras, ver sus triunfos o derrotas, sentir miles de emociones, ver que no siempre se consigue lo deseado o merecido, o por fortuna rendir por encima de tus posibilidades logrando tus mayores éxitos, y observar que siguen siendo las mejores personas de siempre. Me han llenado con sus palabras de ilusión, esperanza y optimismo, y me llevo una caja llena de consejos.
¡Me queda daros las gracias a todos!
¡Me queda daros las gracias a todos!
A mi familia, a mi entrenador Manuel Rodríguez Fernández, a Jesús González, a Fernando Chacón, a Dani (mi compi de entrenos), a Pili, a mis fisios y médicos del CAMD, a mis amigos y compañeros, a mis adversarias dentro del tartán pero amigas fuera de ella, a todos mis compis del mundo del atletismo... Estoy contenta porque todo lo sucedido en años anteriores no fue un sueño... Hoy más que nunca lo siento real, admiro todos mis triunfos y siento la alegría de los míos por ello. Me enorgullezco al ver que no sólo aparecen en momentos de felicidad, sino que siguen aquí, acompañándome durante todo el camino, que se ha presentado con muchos obstáculos en la temporada estival...
Gracias por todo el apoyo desde el primer momento, por no dejar de pensar que he nacido para esto. Me quedo con vuestra compresión, con palabras de rivales y compañeras que me hacen sentirme GRANDE y ALABADA... Todas/os pensáis que valgo, pero que esta temporada las lesiones se han cebado conmigo y no me han dejado progresar, que cualquiera hubiese tirado la toalla y no hubiese ido a Toledo a dar la cara. Son palabras textuales de muchos/as de vosotros que me han aportado serenidad. Gracias de verás porque de este Campeonato no salgo feliz por la medalla, salgo feliz por la confianza y fe que he tenido en todo momento en mí, por la que habéis tenido ustedes y porque no me esperaba tanto apoyo y compañerismo.
Gracias por todo el apoyo desde el primer momento, por no dejar de pensar que he nacido para esto. Me quedo con vuestra compresión, con palabras de rivales y compañeras que me hacen sentirme GRANDE y ALABADA... Todas/os pensáis que valgo, pero que esta temporada las lesiones se han cebado conmigo y no me han dejado progresar, que cualquiera hubiese tirado la toalla y no hubiese ido a Toledo a dar la cara. Son palabras textuales de muchos/as de vosotros que me han aportado serenidad. Gracias de verás porque de este Campeonato no salgo feliz por la medalla, salgo feliz por la confianza y fe que he tenido en todo momento en mí, por la que habéis tenido ustedes y porque no me esperaba tanto apoyo y compañerismo.
Sigo adelante, porque no tengo un destino. Lo que tengo es un largo camino que seguir...
Me vuelve a surgir un contratiempo: el lumbago. Toca recuperarse, fortalecer cada parte de mi cuerpo para que me ayude a ser más fuerte, para que me ayude a llevar una continuidad y a lograr cada reto que me proponga.