Para correr hace falta valentía, valentía para dar un paso hacia el entrenamiento aún sabiendo que será duro, muy duro. Hace falta autoconfianza, y no sólo eso, sino también orgullo y mucho mucho sacrificio. ¿Es acaso esto de cobardes?
Pero yo si que tengo ahora miedo, bueno...más bien incertidumbre. ¿Qué será de mi cuando comience de nuevo las clases universitarias? Voy a tener que remover cielo y tierra para poder cuadrar los horarios... Las asignaturas obligatorias, las optativas (y la que me falta por recuperar gracias al "maravilloso" GRADO o más conocido como plan Bolonia...), apuntarme a natación para recuperarla (sino es imposible), el inglés y los entrenamientos... Es necesario estudiar otra carrera universitaria para poder cuadrarlo todo...
En fin, es lo que hay. Aún tengo dos semanas para comerme la cabeza y hacer miles de planing... Lo peor de todo no es el horario, sino las consecuencias que trae: ¿tendré tiempo para algo más?¿siquiera para estudiar?mucho estrés veo, y lo malo es realizar los entrenamiento sola...
Pero no me voy a ir de cobarde, para eso me esfuerzo a diario y tampoco es la primera vez que me ocurre...estos dos años anteriores también me ocurrió lo mismo, menos mal que ya estoy acostumbrada!
Así que a sacar fuerzas de donde se tenga, a mirarlo todo minuciosamente y a esperar ayuda de la gente. Este año también toca bordarlo y todo acaba de empezar...
Me gusta mucho esta frase (que todo el mundo sabe): " No es como se empieza, sino como se acaba" y como dice mi blog: "Entrena tu mente, tu cuerpo no lo es todo"!. Pues alá! pues a aplicarse el cuento!
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